Perdóname, lo siento, ya no sé ni que hacer. Te sigo amando y siempre te amaré, tú eres el protagonista de mi vida, de mis sueños, de mis pensamientos y de mi vida día a día.
Sé que las palabras se las lleva el viento, y que lo que vale es lo que demuestra una simple mirada o un simple beso, eso nunca se olvida.
Esta vida es como un libro, tiene un principio, pero también un final, a veces malo y a veces bueno.
Cada vez que te veo, me invade ese cosquilleo en el estomago, mi corazón late cada vez más y más rápido, se me corta la respiración, mis ojos se iluminan, y de mi boca nace una pequeña sonrisa.
Ojala esto no fuera tan solo un sueño, porque si no, esa sería la explicación del por qué todo acaba tan rápido y es difícil de olvidar.
esta
ResponderEliminar